Presupuesto para un presente sostenible
21 diciembre, 2018
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Consideramos que la construcción de un país que logre acabar con la pobreza requiere que las políticas públicas pongan como base del desarrollo la relación armónica con la naturaleza, para asegurar que quienes habitamos este país tengamos una mejor calidad de vida.
La marginación más sensible es aquella que se acompaña de la degradación ambiental, así que para mejorar las condiciones de la población necesariamente debemos trabajar en restaurar las zonas degradadas, aprovechar de forma sostenible los recursos naturales y conservar los ecosistemas de alto valor.
En Reforestamos hacemos un exhorto al Presidente Andrés Manuel López Obrador, a sus Secretarias y Secretarios de las diferentes dependencias, también a las y los Diputados del Congreso de la Unión para que al momento de aprobar el Presupuesto de Egresos de la Federación mantengan a los bosques, a la biodiversidad, así como a los compromisos internacionales en materia ambiental, en el primer orden de importancia para orientar la construcción de políticas públicas nacionales que permitan un verdadero desarrollo sostenible.
Las políticas públicas que aseguran nuestros recursos naturales no pueden llevarse a cabo sin un presupuesto acorde a su relevancia como base del bienestar humano y del planeta. De esta manera, pedimos a las autoridades federales que orienten las prioridades de inversión hacia la producción sustentable, haciendo énfasis en que el manejo de los recursos económicos y la implementación de las políticas públicas deben realizarse bajo los principios de transparencia y rendición de cuentas, para conseguir el mejor uso de los recursos con los que se cuentan, y, cuando sea necesario y de acuerdo con los resultados, reorientarlos.
Contar con herramientas de transparencia evitará que la corrupción, desde las esferas más altas, hasta las actividades de campo, se convierta en una amenaza para nuestros recursos naturales.
Por otra parte, reconocemos la atención que se está dando al Programa “Sembrando Vida”, ya que acierta en entender a las acciones forestales como detonadores de empleo y productividad desde la Secretaría del Bienestar. Sin embargo, comprendiendo al desarrollo sostenible como integral, instamos a que se trabaje con el mismo enfoque, formulando equipos de trabajo interinstitucionales, en los que participen especialistas de instancias como la Comisión Nacional Forestal (Conafor).
Asimismo, consideramos que este nuevo gobierno tiene la gran oportunidad de cambiar la todavía predominante forma de hacer e implementar los programas y políticas públicas, tales como la falta de coordinación interinstitucional, que ha prevalecido, y que impide responder a una visión territorial.
Una auténtica transformación requiere una nueva gobernanza en la que las Organizaciones de la Sociedad Civil, las comunidades y ejidos, y el sector privado puedan participar para aportar sus conocimientos y experiencias a fin de contar con las mejores prácticas de producción sostenible y fortalecimiento de capacidades para una gobernanza local como la comercialización de los productos que vienen del campo y de los bosques, logrando así sinergias para la competitividad y la transformación de la realidad.
Un buen ejemplo de cómo lograr que el PEF2019 se oriente para alcanzar un presente sostenible, es que las acciones forestales que emprendan la Conafor y la Secretaría del Bienestar -cabeza del Programa “Sembrando Vida”- se complementen con talento que oriente a la población rural a organizarse, asociarse y emprender para crear empresas rurales capaces de producir y comercializar sus productos; asimismo, consideramos indispensable que se implementen las mejores prácticas -de gobernanza, productivas, comerciales, administrativas, financieras, ambientales- para asegurar que los objetivos esperados de las acciones forestales perduren a lo largo del tiempo y ayuden a adaptar a las comunidades más vulnerables al cambio climático.
Nuestra experiencia nos ha mostrado que el país necesita nuevas herramientas para trabajar con enfoque territorial, un ordenamiento jurídico que garantice el respeto a los derechos humanos, particularmente el de un ambiente sano, y una relación armónica con los recursos naturales. Para ello, necesitamos que se asuman los principios de un gobierno abierto y democracia participativa, que avance en la consolidación de un camino para alcanzar el desarrollo sostenible.
Reforestamos México A.C.