Llegó la temporada navideña y con ello la compra y venta de árboles naturales; sin embargo, aún existen muchos mitos respecto a lo que es mejor para el medio ambiente: ¿vale la pena comprar un árbol natural?

A continuación te presentamos algunos mitos y realidades para que sepas la verdad de una vez por todas.

Mito: cuando compras un árbol natural provocas daños irreversibles a los ecosistemas boscosos.

Realidad: cada vez que un árbol se corta en una plantación forestal comercial certificada, inmediatamente es sustituido por otro, el cual brindará servicios ambientales como la captura de carbono de forma continua, entre cinco y ocho años.

Mito: los encargados de talar árboles lo hacen de manera ilegal e inconsciente, sin considerar los daños a los bosques.

Realidad: existen plantaciones forestales certificadas en donde puedes comprar un árbol sin afectar los bosques, te recomendamos revisar que el arbolito navideño que adquieres, cuente con el sello del Forest Stewardship Council (FSC® por sus siglas en inglés), lo que garantizará que ha llegado hasta a ti mediante procesos forestales responsables.

Adquirir un árbol natural con certificación y cultivado en México, es una forma de apoyar a los pequeños productores, incentivando el crecimiento económico y fomentando nuevos empleos en zonas forestales.

Mito: los árboles naturales solo son utilizados para la temporada navideña y luego son desechados.

Realidad: al finalizar la temporada no todos los árboles van a la basura, pueden servir para realizar artesanías o mezclas orgánicas y composta, que ayudan a restaurar y preservar los suelos.

Los gobiernos de los estados cuentan con programas de acopio de árboles navideños, una vez transcurrida la temporada, por ejemplo, el gobierno de la CDMX, desde el 2012 ha llevado a cabo el programa Árbol por Árbol Tu Ciudad Reverdece, instalando centros de acopio en las 16 alcaldías, donde puedes intercambiar tu árbol por una plantita.

¿Ya compraste tu árbol de Navidad?